jueves, 27 de noviembre de 2008

El hombre-roca - Tanya Tynjälä


EL HOMBRE-ROCA
Tanya Tynjälä

El Hombre-Roca vive solo en su isla, rodeado de carteras marroquíes, cadáveres de arpas, lámparas sin terminar y restos de galletas de coco. Lo protegen cuatro sanguinarios perros calvos que desgarran hasta la sangre más fiera.
Dicen que en un reino dividido había un principito que nunca llegó a ser personaje de cuento, pues su madre le mordió el corazón. Él, adolorido, cubrió su palpitar con rocas de odio e indiferencia, buscó la isla más sucia y olvidada, se inventó recuerdos sin pasado y decidió vivir sin cerrar los ojos.
Alguna vez una ninfa se acercó a llorar entre sus brazos; sólo encontró frío y las agudas aristas le causaron dolor.
Ahora el único ser que osa visitar sus costas es el León Marino de las Nieves, quien le ha contado a los delfines que todas las noches escucha el débil llanto de un niño.

2 comentarios:

pato dijo...

Hermoso... inspira ternura.

Tanya Tynjälä dijo...

Muchas gracias Pato :-)